Se tiró la policía...
Esa fue la frase que escuche mientras caminaba hacia mi apartamento, toda la atención
de la calle San Juan esta puesta en esa situación. Los motoconcho se miraban
entre si y se esfumaban lentamente de los alrededores evitando ser interrogado
por las "autoridades", yo seguí caminando con mas seguridad y firmeza
porque no temía nada no tenia ni un paquetico, yo venia de mi trabajo de 18
horas laborales corrida.
Me acerque
con disimulo cuando logre divisar a los comandos apostado en la esquina de mi
casa en plena chercha con quien parecía ser una menor de edad, de inmediato gargantee
y mire los alrededores cuando alcance a ver un buen vecino que tomaba apunte de
las instrucciones de un comandante de tamaño baquebolistico y estructura de
robocot.
Que ironía la
de mi barrio ya la gente esta tan acostumbrada a la violencia que la mínima presencia
militar le causa curiosidad y parte del hecho de que algo malo pasa o esta por
pasar. Yo sigo en mi barrio y sigo caminando con pie firme y cansancio disimulado,
porque ni un tigre me quitara lo que gano
y ni un policía me pondrá nervioso.
Que le pasa a nuestro mundo, que nos pasa ya nada nos admira, hemos perdido tanto, hay tantas cosas bellas, debemos recordarlas y salir
ResponderEliminarEscribes muy bien.
ResponderEliminarAsi de vez en cuaanto occure algo que nos hace ver la realidad de nuestra vida. Eso me gusta que le haya compartido conmigo.
Gracias, Daniel
PS Robocop con P por Policia
GRACIAS POR TUS COMENTARIOS... SEGUIRE ESCRIBIENDO DE LA COTIDIANIDAD DE LOS PASILLOS DE LA VIDA Y DE LAS SONRISAS BARRIALES...
ResponderEliminar